Once postulantes, para un solo galardón
De la academia a facebook, pasando por la prensa. El debate sobre el Premio Nacional de Literatura ha estado más encendido que nunca. Esta semana se cerraron las postulaciones y la candidatura de Antonio Skármeta viene a agregarle incertidumbre, pues el autor conjuga el éxito popular de sus últimos libros con el reconocimiento crítico que obtuvo en su primera etapa.
por Roberto Careaga C.La Tercera - 23/07/2010 - 08:00Compartir No fue fácil encontrar a un reemplazante para Efraín Barquero después de que el poeta renunciara a su lugar en el jurado del Premio Nacional de Literatura 2010. El Ministerio de Educación estuvo obligado a volver 10 años en el tiempo. Siguiendo lo estipulado en la ley, fueron a buscar un sustituto para Barquero en los anteriores galardonados: José Miguel Varas y Armando Uribe se declararon inhabilitados por haber manifestado públicamente sus preferencias. Volodia Teitelboim, reconocido en 2002, está muerto. Tuvieron que llamar al premiado del año 2000: Raúl Zurita. "Es un feroz lío", dice el autor de Purgatorio, que sin embargo aceptó. "Me lo tomo con preocupación, pero qué diablos... Qué diablos", agrega el poeta con la resignación de quien es enviado al frente de batalla.
Pero no, el Premio Nacional de Literatura no es un botín de guerra. Aunque este año varios estén dispuestos a disparar. "Está agitada la discusión", dice Poli Délano, aspirante al galardón, constatando lo indesmentible: como pocas veces, el Nacional cruzó la esfera literaria, para llegar hasta las oficinas de ex Presidentes y senadores, encontró espacio en grupos de Facebook y un lugar en las sobremesas de cualquier familia. Hay una razón: Isabel Allende, la más popular escritora de Chile, está en carrera. Y aunque para muchos el premio ya está en sus manos, esta semana surgió un postulante que se lo podría arrebatar: Antonio Skármeta fue presentado por la Fundación Pablo Neruda.
Hasta ahora no estaba claro cuál sería la posición del autor de Ardiente paciencia y conductor de El Show de los Libros en el premio de este año. Su entrada reordena la cartas: Skármeta no sólo tiene popularidad; tiene algo que a Allende siempre le ha pesado: es autor de un puñado de libros (los de su primera etapa) celebrados por la crítica. "No sería bueno que yo hablara de este tema", dijo ayer el escritor a La Tercera al llegar de México. Ni siquiera reconoció la postulación, la que fue confirmada por uno de los directores de la Fundación Neruda, Enrique Inda.
Además de Allende y Skármeta, nueve escritores corren por el premio, según informó el Ministerio de Educación, que el miércoles pasado cerró el plazo para las postulaciones. La lista la complementan: Germán Marín, Enrique Lafourcade, Jaime Valdivieso, Francisco Rivas, Isidora Aguirre, María Elena Gertner, Fernando Emmerich y Jorge Guzmán. Este último es un optimista: "Me parece excelente la agitación pública. Es estupendo que la gente entre de nuevo en el interés por las letras".
EL CASO ALLENDESin aspavientos, Marín envió a su esposa al Ministerio de Educación a entregar su postulación. Después de que dijera que se trataba de un "premio de ratas", ya no quiere aportar al fuego. "Estoy más interesado en la discusión que se ha dado en torno al Premio Nacional de Música. Es más transparente", ironiza el autor de La segunda mano, absteniéndose de dar su opinión. Para eso hay otros.
Apoyada por los cuatro ex Presidentes de la Concertación, casi 2.000 personas en Facebook y escritores como Marcela Serrano y Roberto Ampuero, Allende ha motivado una serie de enfrentamientos de columnas y opiniones en internet y diarios. Idas y vueltas entre el crítico Rodrigo Pinto, el poeta Leonardo Sanhueza, Rafael Gumucio, Antonio Gil (que pidió terminar para siempre con el premio) y las novelistas Elizabeth Subercaseaux y Pía Barros. Estas últimas acusan "misoginia y resentimiento" contra Allende. A los primeros, los resume esta frase de Pinto: "Si lo que se quiere es premiar excelencia literaria (...) el premio a Allende parecerá una cesión espuria a favor de la fama y la popularidad".
Serrano ve el lado positivo del "ruido" en torno a Allende. Según ella, quienes partieron criticándola "envalentonados", se han retirado "tímidamente". "Gane o no gane, si en algo se ha avanzado en esta vuelta es que ya no resulta gratis atacar e insultar a un miembro de la comunidad literaria", dice. Y añade: "Pero creo que este año puede, por fin, ganar. Ojalá al jurado le ronden los espíritus de la Mistral y de la Bombal (junto a miles y miles de lectoras descontentas), recordándoles las vergüenzas que han marcado la historia de este premio".
Para Pablo Dittborn, director de Random House Mondadori, sello de la escritora, se trata de premiar trayectoria y el impacto que sus libros han tenido en el mundo. "Lo que Allende ha logrado que se sepa de Chile es infinitamente mayor a lo que ha hecho ProChile o Imagen País. Hay un clamor de la población que cree que se lo merece tremendamente. Si no se lo dan, va a quedar una sensación de injusticia", asegura.
El escritor y director de The Clinic, Patricio Fernández, abre otro flanco: "No sé cuán bueno sea para ella todo este apoyo político y extraliterario; a los que participamos más de la esfera literaria pareciera confundir. Y a algunos, indignar", dice. Más aburrido que indignado, Gonzalo Contreras apunta: "Yo definitivamente no votaría por Allende bajo ningún aspecto, pero quizás sería bueno que se lo dieran para que termine el tema. Para terminar con el caso Allende de una vez por todas".
EL VOTO DE ZURITAPionero en echar a andar una campaña por Allende este año, Jorge Edwards también ha mostrado interés porque este año el galardón recaiga en Diamela Eltit. La autora de Lumpérica, sin embargo, no fue presentada al Nacional por expresa petición de ella. De hecho, declinó una propuesta de editorial Planeta para apoyarla. Pero tiene respaldo: no sólo de Fernández ("su aporte a la literatura chilena es innegable"), también de un inesperado personaje clave: Raúl Zurita.
El poeta, ex esposo de Eltit, la ha apoyado públicamente en años pasados. Cuando en 2006 el premio le fue otorgado a José Miguel Varas, Zurita fue consultado por La Tercera. Dijo lo siguiente: "Quienes acusan al Premio Nacional de machismo han demostrado tener toda la razón. Varas es un escritor correcto, no más que eso, y la que se lo merecía con creces es Diamela Eltit, autora de una obra extrema, brillante, que no sólo hace de ella el escritor (hombre o mujer) lejos más relevante de nuestro país, sino una de las más notables de nuestra lengua. Qué pena, qué lamentable".
Zurita no se desentiende de sus palabras. "Sí, es un hecho de la causa. Vamos a ver, a lo mejor tendré que invalidarme. La verdad es que no tengo la menor idea de quienes se presentan. No sé absolutamente nada", dice. Y adelanta la fecha en que se definirá su destino dentro del jurado: el viernes 6 de agosto, cuando el jurado se constituya. Ahí también se fijará una fecha para entregar el premio. Pero, como siempre, ya se sabe que esta guerra terminará a fines de agosto.