El octogenario escritor y filólogo mexicano Ernesto de la Peña, que hace una semana recibió el Premio Iberoamericano Menéndez Pelayo 2012, falleció
El escritor mexicano Ernesto de la Peña muere a los 84 años
El intelectual falleció cuatro días después de recibir el Premio Iberoamericano Menéndez Pelayo.
CIUDAD DE MÉXICO.- El octogenario escritor y filólogo mexicano Ernesto de la
Peña, que hace una semana recibió el Premio Iberoamericano Menéndez Pelayo 2012,
falleció en la capital mexicana, según informó hoy el Consejo Nacional para la
Cultura y las Artes (Conalculta).
"Ha muerto Ernesto de la Peña. Las letras mexicanas, la patria de la ñ, están de luto: pierden a uno de sus mayores estudiosos", dijo la directora de Conaculta, Consuelo Saizar, en su cuenta de Twitter.
El autor de 84 años creó una extensa obra que incluyó poesía y ensayos, con libros como "Los estratagemas de Dios" (1988) o "El indeleble caso de Borelli" (1992), que lo llevaron a ocupar desde 1993 una silla como miembro permanente de la Academia Mexicana.
De la Peña fue filólogo, experto en más de 30 lenguas antiguas y modernas, y su obra incluyó trabajos sobre el chino, el sánscrito y el hebreo. También fue especialista en el tema religioso y escribió varios textos sobre la Biblia.
Además, era un amplio conocedor y divulgador de la música, especialmente de la ópera, sobre la cual mantuvo un programa habitual en la radio mexicana.
En 2003 el gobierno mexicano le concedió el Premio Nacional de las Ciencias y las Artes.
"Ha muerto Ernesto de la Peña. Las letras mexicanas, la patria de la ñ, están de luto: pierden a uno de sus mayores estudiosos", dijo la directora de Conaculta, Consuelo Saizar, en su cuenta de Twitter.
El autor de 84 años creó una extensa obra que incluyó poesía y ensayos, con libros como "Los estratagemas de Dios" (1988) o "El indeleble caso de Borelli" (1992), que lo llevaron a ocupar desde 1993 una silla como miembro permanente de la Academia Mexicana.
De la Peña fue filólogo, experto en más de 30 lenguas antiguas y modernas, y su obra incluyó trabajos sobre el chino, el sánscrito y el hebreo. También fue especialista en el tema religioso y escribió varios textos sobre la Biblia.
Además, era un amplio conocedor y divulgador de la música, especialmente de la ópera, sobre la cual mantuvo un programa habitual en la radio mexicana.
En 2003 el gobierno mexicano le concedió el Premio Nacional de las Ciencias y las Artes.
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