Mil ochenta libros desaparecieron de un día para otro en
la Biblioteca Nacional, edificio ubicado en la
Alameda.
Eso es el extraño caso que indaga la Policía de
Investigaciones (PDI), luego que la Dirección
de Bibliotecas, Archivos y Museos (Dibam) presentara
una denuncia ante la justicia.
En un primer momento se pensaron que los textos extraviados no eran más de
cuarenta, sin embargo, un nuevo inventario determinó que las desapariciones
ascendían a más de mil.
De acuerdo a lo publicado por el diario El Mercurio, se trata de
textos entregados a la biblioteca por autores y editoriales en el marco de la
Ley de Depósito Legal, normativa que obliga a hacer llegar 15
ejemplares antes que sean entregados a las librerías para su
comercialización.
La policía ha interrogado a una decena de funcionarios de la biblioteca,
especialmente a quienes recepcionan los libros enviados por los autores, debido
a que son los responsables de almacenar y registrar los títulos que llegan.
El mismo diario señala que los interrogados tienen versiones encontradas
sobre lo que sucedió. Incluso algunos reconocieron que un grupo cayó en malas
prácticas, actuar que fue seguido por el resto de los funcionarios.
Agregaron que los libros sustraídos eran vendidos a un bajo precio en puestos
del persa Biobío y del sector San Diego.
La policía instruyó al fiscal de la Unidad de Flagrancia de la zona
metropolitana Centro Norte, Marcelo Cabrera pára
investigar el caso.
Por ahora el persecutor intentó interrogar a los supuestos autores del hecho,
pero éstos se encuentran con licencia médica y ha sido imposible ubicarlos.
Además, se buscará saber si el hurto era ha pedido, antecedente revelante
porque mucho de los textos sustraídos eran los más vendiddos en las librerías
del país. De hecho, entre los títulos que se perdieron está "50 sombras
de Grey".
<< Home