TOTAL RESPALDO DEL SENADO A LA CONDUCCIÓN DE LAS RELACIONES EXTERIORES
20/11/2009
Valparaíso 09/10/2009 Presidencia del Senado de la Republica de Chile
CONFLICTO CON PERÚ: ¿REAL O INVENTADO?
CONFLICTO CON PERÚ: ¿REAL O INVENTADO?
Senado entregó su total respaldo a las acciones del gobierno de Chile
Por Jovino Novoa, Presidente del Senado
No podemos permitir que el reciente impasse con Perú derive en un problema mayor para las relaciones entre ambos países. Recordemos que el origen del conflicto, un supuesto caso de espionaje, no está demostrado, por lo que la escalada de declaraciones de las autoridades peruanas puede no tener un asidero real o ser una sobre reacción a un problema menor.
Lo que los países vecinos tienen que hacer es tratar de solucionar las dificultades y no escalarlas y me parece que de parte del gobierno de Perú ha existido una clara intención de agudizar un problema, siendo que ni siquiera sabemos si el problema existe o no.
Aunque sobran las ganas de responder a las provocaciones, ahora provenientes del presidente Alan García, el Gobierno chileno ha reaccionado sin aspavientos pero de manera firme y decidida. Es conveniente mantener esta actitud de prudencia y moderación para no darle cabida a la estrategia que busca inflar con bombín cualquier roce para usarlo a su favor.
Es evidente que hay sectores en Perú que buscan enturbiar las relaciones para obtener dividendos políticos. En ese contexto se explica la petición de parlamentarios peruanos de revisar el TLC con Chile, cuando todos sabemos que dicho tratado ha sido extraordinariamente beneficioso tanto para Perú como para nuestro país.
Eliminar un instrumento que ha sido clave para el desarrollo económico de ambos países es irresponsable y eso lo saben bien las autoridades del país vecino. Por algo han promovido hasta ahora la política de las cuerdas separadas para las materias políticas, económicas y comerciales, aunque el canciller García Belahunde intente ponerlo ahora en entredicho.
En mi reciente reunión con la presidenta Michelle Bachelet le transmití el total respaldo del Senado a la conducción de las relaciones exteriores y le expresé nuestra solidaridad ante los ataques injustificados que nuestro país y autoridades están recibiendo de parte de Perú.
Para mantener el conflicto dentro de ciertos límites y para no agregarle más carbón al fuego, es necesario que todas las fuerzas políticas se mantengan alineadas tras la presidenta, formando una voz unívoca y potente. Al enfrentar así las declaraciones destempladas que vienen desde Perú se dificulta que éstas escalen demasiado.
El hecho de que Chile no "enganche" ante las provocaciones no obsta a que se utilicen todos los medios al alcance para revertir la campaña de desprestigio que se está haciendo en la comunidad internacional, ya que ello podría perjudicar nuestra posición ante la Corte Internacional de La Haya.
Finalmente, el intento de Perú por presentar a Chile como un país belicoso que impulsa una carrera armamentista es una acusación injusta y un intento por controlar las decisiones que nuestro país debe tomar en forma soberana, como es la compra de armamento. En ese sentido, está fuera de lugar la queja realizada por autoridades peruanas por la posible compra de misiles y radares a Estados Unidos.
Este caso se suma a otros tantos, como los dichos del general Donayre, las críticas a la operación Salitre II, la acusación de que existe un pacto bajo la mesa entre Chile y Bolivia y la propuesta de García de un pacto de no agresión, lo que demuestra una actitud poco amistosa que el gobierno peruano debiera rectificar, ya que deben existir buenas relaciones entre países hermanos.
Por Jovino Novoa, Presidente del Senado
No podemos permitir que el reciente impasse con Perú derive en un problema mayor para las relaciones entre ambos países. Recordemos que el origen del conflicto, un supuesto caso de espionaje, no está demostrado, por lo que la escalada de declaraciones de las autoridades peruanas puede no tener un asidero real o ser una sobre reacción a un problema menor.
Lo que los países vecinos tienen que hacer es tratar de solucionar las dificultades y no escalarlas y me parece que de parte del gobierno de Perú ha existido una clara intención de agudizar un problema, siendo que ni siquiera sabemos si el problema existe o no.
Aunque sobran las ganas de responder a las provocaciones, ahora provenientes del presidente Alan García, el Gobierno chileno ha reaccionado sin aspavientos pero de manera firme y decidida. Es conveniente mantener esta actitud de prudencia y moderación para no darle cabida a la estrategia que busca inflar con bombín cualquier roce para usarlo a su favor.
Es evidente que hay sectores en Perú que buscan enturbiar las relaciones para obtener dividendos políticos. En ese contexto se explica la petición de parlamentarios peruanos de revisar el TLC con Chile, cuando todos sabemos que dicho tratado ha sido extraordinariamente beneficioso tanto para Perú como para nuestro país.
Eliminar un instrumento que ha sido clave para el desarrollo económico de ambos países es irresponsable y eso lo saben bien las autoridades del país vecino. Por algo han promovido hasta ahora la política de las cuerdas separadas para las materias políticas, económicas y comerciales, aunque el canciller García Belahunde intente ponerlo ahora en entredicho.
En mi reciente reunión con la presidenta Michelle Bachelet le transmití el total respaldo del Senado a la conducción de las relaciones exteriores y le expresé nuestra solidaridad ante los ataques injustificados que nuestro país y autoridades están recibiendo de parte de Perú.
Para mantener el conflicto dentro de ciertos límites y para no agregarle más carbón al fuego, es necesario que todas las fuerzas políticas se mantengan alineadas tras la presidenta, formando una voz unívoca y potente. Al enfrentar así las declaraciones destempladas que vienen desde Perú se dificulta que éstas escalen demasiado.
El hecho de que Chile no "enganche" ante las provocaciones no obsta a que se utilicen todos los medios al alcance para revertir la campaña de desprestigio que se está haciendo en la comunidad internacional, ya que ello podría perjudicar nuestra posición ante la Corte Internacional de La Haya.
Finalmente, el intento de Perú por presentar a Chile como un país belicoso que impulsa una carrera armamentista es una acusación injusta y un intento por controlar las decisiones que nuestro país debe tomar en forma soberana, como es la compra de armamento. En ese sentido, está fuera de lugar la queja realizada por autoridades peruanas por la posible compra de misiles y radares a Estados Unidos.
Este caso se suma a otros tantos, como los dichos del general Donayre, las críticas a la operación Salitre II, la acusación de que existe un pacto bajo la mesa entre Chile y Bolivia y la propuesta de García de un pacto de no agresión, lo que demuestra una actitud poco amistosa que el gobierno peruano debiera rectificar, ya que deben existir buenas relaciones entre países hermanos.
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